TUBERÍAS DE PLOMO
¿Qué son?

El plomo es un metal que, en el pasado, se utilizó como material de fontanería, en tejados y construcción de ventanas hasta que en los años 80 se fueron sustituyendo por tuberías de hierro o cobre en las zonas residenciales.

Aparte de las tuberías también podemos encontrar plomo en soldaduras, accesorios o en acometidas a las casas.

Hoy en día está prohibida la utilización de este material para la construcción por su toxicidad cuando se corroe. Lo que supone un peligro para la salud ya que contamina el agua que bebemos.

¿Es una reforma obligatoria?

El Real Decreto 140/2003 de 7 de febrero, es la normativa que regula el agua de consumo humano en toda España. En esta ley se establecen los criterios sanitarios de la calidad que debe tener el agua para el consumo humano y en su art.20 se prohíbe explícitamente la presencia del plomo en aguas suministradas a través de una red de distribución pública o privada.

Si las tuberías están exclusivamente en una vivienda particular, el coste de la reforma depende de los propietarios. En caso de que las tuberías de plomo estén en la instalación del edificio, es decir, que afecta a todos los vecinos, la comunidad es la encargada del reemplazo.

Si se detecta tuberías de plomo en nuestro vivienda las recomendaciones a hacer serían:

Antes de utilizar el agua del grifo para beber o cocinar con ella, dejarla correr, sobre todo si no se ha utilizado durante 6 horas o más, hasta que salga más fresca, esto indicará que ha entrado agua de la red general y el riesgo baja considerablemente.

Desde la experiencia de Obrallar recomendamos la sustitución de este tipo de instalaciones para garantizar la calidad del agua que utilizamos para la vida diaria.